Francisco Guardeño Roldan
EL PRODUCTO
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El poder de atracción de ciertos bienes no ejerce la misma influencia en cualquier persona; ello exige de las empresas que quieran vender sus productos empezar por identificar al conjunto de personas que pueden comprarles cosas que necesiten, y que estén dispuestos a pagar por ellas.
Lo anterior es el comienzo de la creación del producto, de diseñar un objeto capaz de satisfacer las demandas de los clientes, manejando factores como la calidad del producto, su marca, el diseño, tamaño, forma, etc.
Concepto y definición de producto.
El producto no es sólo un objeto físico, sino también un medio para comunicar a través de la representación física de su envase o etiqueta.
Los productos entendidos como objetos carecen de valor para los clientes, este se lo da la capacidad que tengan para solucionar problemas o satisfacer inquietudes en los clientes.
Así pues los productos son conjuntos de atributos con los cuales se satisfacen necesidades, inquietudes e intereses de los que la utilizan, por lo tanto los clientes no quieren productos sino soluciones o servicios.
Este efecto de integración no únicamente reduce el tiempo de disponibilidad y acrecienta la calidad de la información manejada horizontalmente, sino que ayuda extraordinariamente a la dirección a tomar decisiones teniendo en cuenta la impresión de un determinado suceso en toda la organización.
Antes sólo se sabía el efecto causado desde el departamento donde se daba el input, y por eso era la dirección la que tenía que descifrar e interpretar la información.
Ahora, sin embargo, el sistema integrado permite la valoración del mismo dato desde varios departamentos y a varios niveles de importancia y la dirección tiene información contrastada de varias fuentes competentes y se pueden tomar las decisiones pertinentes.